domingo, marzo 13, 2005

lo que aprendo de lencho

Cinco minutos
Oscar Ocelotl Aguirre Escudero

Volviste a mi mente en esos cinco minutos
que reservo tan solo para pensar en ti
volviste con todos los recuerdos recordables,
con todas las locuras, con todos los te quiero
y en esos cinco minutos tan tuyos
ni siquiera tu ausencia me asfixia
solo vuelo y me enamoro de nuevo
y quiero abrazar tu figura en el humo
solo para deshacerla e inventarla otra vez,
aguzo mis oídos para distinguir tu voz
que en esos cinco minutos es tan dulce y tranquila
sin reclamos, sin miedos, sin angustias
sin más pretensión que acompañarme en mi soledad
esa soledad tan necesaria como destructiva
y en el transcurso de esos, tus cinco minutos
te vuelvo a inventar con el humo
te invento con alas, con aureolas, con fragancias
te invento dormida entre mis brazos
hasta que al fin se consumen esos cinco minutos
que afortunadamente no se roban mi sonrisa
pues esos cinco minutos tan tuyos, tan nuestros
inevitablemente se aparecen
cada cinco minutos de mi vida

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