Veo la vida pasar ante mí, rodeada de un suave esplendor carmesí. Las hojas de los árboles giran sigilosas, movidas por un suspiro... por un trozo de aliento. La tarde es joven, los hombres caminan presurosos, cansados de trabajar... o quizá de holgazanear. Veo mujeres manejando su carro, hablando por el celular o pintando sus labios. Veo niños jugar a los ladrones y niñas jugar a que son mamás... como las que en este momento manejan el carro hablando por el celular.
Escucho pasar la vida ante mí, plagada de tintineos como de rubí. Escucho el murmullo del viento, el suave crepitar del fuego. Escucho el canto de los jilgueros, escucho el maullido de un gato viejo...
*entra Genaro a interrumpir*
G- sabes, yo añoro españa
Y- yo añoro el ruido del agua, regando las plantas del jardín donde crecí...
G- yo añoro francia
Y- añoro el olor del plátano frito con arroz, llegando desde la cocina, impregnado de carbón
G- yo añoro alemania
Y- añoro la suavidad de la luz que entraba por la ventana en las tardes, sentada junto a mi madre
G- yo añoro ser un niño, inocente...
Y- añoro esos detalles, que de mi niñez quizá suenen insignificantes
G- la alegría del porvenir, la superficialidad de los problemas, la primaria, las tortas de frijol de mi abuela
Y- pero que desde mi sillón de inválida son el único respiro para mi soledad... añoras tú, añoramos todos porque haber crecido lejos de casa fue duro, pero más duro es morir de regreso en ella...
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