viernes, octubre 18, 2013

Cómo prepararse para un FAMTrip.

En mi serie de tutoriales periodísticos, ahora les ofrezco tips para trabajar en un viaje de familiarización.

No es igual cubrir un festival o un junket que ir a una ciudad para conocerla y escribir sobre ella. El periodismo de viajes es uno de los más interesantes en cuanto a estilo de vida, además de ser muy versátil. Pero, a diferencia de lo que podría creerse, no todo es coser y cantar. Hacer un FAMTrip o lanzarse a la aventura para escribir un artículo puede ser complicado y motivo de arrepentimientos futuros (¿por qué no visité este lugar genial perfecto para mi target? ¿por qué no aproveché ese gran suceso para hacer un video? ¿por qué perdí horas buscando este lugar? etcétera).

Empecemos por lo básico: ¿qué es un FAMTrip?
Un viaje de familiarización o FAMTrip es una de esas líneas difusas en el periodismo de estilo de vida. Las agencias de relaciones públicas de hoteles, ciudades, países, vinos, restaurantes, inserte-usted-aquí-lo-que-se-le-ocurra organizan paseos con los compañeros de la prensa para que conozcan la marca, se familiaricen con ella y escriban algo al respecto. Ahí entra el dilema. O, mejor dicho, el riesgo de la marca: que lleves a un periodista y lo consientas no significa que escribirá algo bueno sobre ti. Que una marca te lleve a algún lugar no significa que tú, periodista, estés obligado a escribir algo bueno sobre ella. A veces, incluso, puedes escribir nada. Pero si todo fue genial y maravilloso y amaste la ciudad, no quiere decir que no puedas escribir eso. En caso de duda extrema, consulte usted a su editor, confesor o colega de confianza.

Entonces... te invitaron / asignaron a un FAMTrip. ¿Qué hacer ahora? Hay algunos temas básicos que debes resolver:

  • Documentación. Asegúrate de tener un pasaporte vigente (o identificación oficial, si no saldrás de México) y de los requisitos migratorios del país al que vas. Si te invitan a Estados Unidos o Canadá y no tienes visa... ojalá tengas tiempo para solicitarla, si no, so sorry, next! Algunas embajadas tienen procedimientos más tortuosos, de modo que lee bien sus páginas de información. No quieres perderte un viaje interesante porque olvidaste entregar un documento. Tip: si estás lidiando con la agencia de RPs de un país, seguramente podrán ayudarte con esto.
  • Asegúrate de tener todos los datos. Itinerario, dress codes, aerolínea, número de vuelo, hora de salida, hora de llegada, hotel donde te hospedarás, teléfono y nombre del RP encargado. Es tu responsabilidad mantenerte vivo. Los RPs pueden hacer mucho, pero también son humanos y se equivocan. Si pierdes un avión, que sea por un huracán, no porque confundiste la hora de salida entre AM y PM. Si nadie te recoge en el aeropuerto, debes poder conseguir un taxi (¡y pedir recibo!) que te lleve a tu hotel. Etcétera.
  • Moneda local. Me ha pasado ser la novata que sale del país sin cambiar su dinero a la moneda del lugar a donde llegará. Llegué a Bogotá con dinero mexicano... en Colombia no te cambian dinero mexicano. Cambia dólares antes de subirte al avión. Averigua la moneda local y calcula en ambas denominaciones, no quieres gastar y gastar porque suena barato para descubrir que tu cuenta de la tarjeta de crédito ahora es insostenible (eso, para que vean, no me ha pasado).
  • Fecha límite. Te vas a mediados de julio, pero tal vez tu historia es para el número de octubre. O te vas a principios de octubre y tu historia quizá sea para ESA MISMA SEMANA porque es para web y tu editor está un poco loco. Pregunta, antes de irte, para cuándo tienes que entregar qué cantidad de caracteres (o de material audiovisual). Así sabrás si necesitas empezar a escribir desde la primera noche o si tendrás un colchón para reestructurar, anotar y complementar.
  • Maletas. ¿Cuánto tiempo te vas? ¿Un par de días? ¿Una semana? Considera la cantidad de tiempo, tus necesidades básicas de cobertura (puedes referirte a este post, la verdad es que el equipo no cambia mucho), tus necesidades básicas de ser humano (si te molesta mucho usar shampoo de hotel o eres de piel delicada, si vas a un lugar húmedo y te crece el cabello como a Mónica en Friends, etc.) y ...
  • ¡Códigos de vestir! Estos fabulosos inventos de la civilización pueden torturar tu cartera y tu paciencia. Upscale formal. Smart. Outdoor cocktail. Formal. Business attire. Casual. Innovative. Etcétera. Pregunta primero al PR en turno, pues él/ella tiene la lista mágica de las actividades del viaje: cenas, catas, deportes extremos, clases de ejercicio físico, temazcales, cocteles, funciones de gala, bla. Después pregúntale a San Google o a tu fashionista de confianza. Y considera que probablemente necesitarás comprar ropa antes de irte, así que asegura esta información al menos una semana antes de partir.
  • Mapea y planea. ¿Es tu primera vez en la ciudad? ¿Regresas a una ciudad que ya habías visitado? ¿Conoces a alguien que ya haya estado ahí? Averigua cuanto puedas antes de irte. Listas de lugares turísticos (aunque sea para evitar el cliché y excluirlos de tu artículo), rutas interesantes, datos curiosos, medios de transporte (para el tiempo libre del que hablaré a continuación)... Google Maps, Wikipedia y las páginas de turismo de los periódicos locales serán tus aliados. 
  • Tiempo libre. Existe, no siempre te parecerá suficiente, pero a menos que el PR te encadene a su brazo, seguramente lo tendrás. Quizá tu avión llega antes que el resto del grupo (ah, sí, estos viajes generalmente se hacen en grupo), o las actividades del día terminan a las 7PM, o visitarán ese sitio al que ya habías ido y no te interesa tanto. Encuentra un poco (o un mucho) de tiempo libre y camina la ciudad, a veces así se descubren los mejores lugares. Súbete a un autobús o al metro y busca ese sitio interesante del que leíste en tal revista o esa locación donde se filmó algo que te gusta. Le dará más color a tu texto y disfrutarás mucho ese ratito a solas.
  • Compañeros de viaje. Estos paseos suelen darse en grupo, utilízalos para hacer contactos globales. A veces encontrarás personas muy divertidas y agradables, otras no tanto, pero seguro aprendes de alguien más. Y si tienes buena suerte, puedes incluso hacerte de una bandita para fiestear en el proverbial tiempo libre... o al menos, para beberte una cerveza en el bar del hotel. Si eres como yo y te cuesta trabajo dejar ir el caparazón de la introversión y la timidez, date tiempo, encontrarás la manera de integrarte. La gente no muerde.
  • WiFi. El problema que cruza fronteras. La mayoría de los hoteles tienen internet gratis en el lobby. Por una cuota extra puedes tener internet en tu habitación. En mi caso, como mi trabajo base en Editorial Mapas involucra administrar dos sitios web, me es muy necesario poder conectarme constantemente. Si tienes que enviar pendientes o entregar notas diarias, porque help you God, entonces no dudes en pagar esa cuota extra. Ya después averiguas si puedes cubrirla con viáticos o con facturación.
  • Público meta. No importa qué tan nerd, hipster, fresa, o high class seas, si olvidas a tu público meta, toda la investigación y experiencia se van al traste. ¿Escribes en una revista para gamers? Busca los mejores arcades. ¿Escribes en un medio más bien de alto perfil? Busca los restaurantes con los mejores chefs. ¿Ejecutivos? Enlista los hoteles con mayores beneficios para una convención de negocios. Y así.
  • Multimedia. Lo más probable –porque vivimos en el siglo XXI, gracias– es que tu historia sea publicada en línea, así que piensa multimedia. ¿Qué contenido audiovisual manejan en tu medio? ¿Fotogalerías? ¿Video? ¿Rutas geolocalizables? Ten en cuenta esto desde que planees tu maleta: ¿qué gadgets llevarás?, ¿cuántos cables?, ¿baterías extra? Revisa la configuración de tu equipo para confirmar la resolución de imagen, la memoria, la duración de la batería, etcétera. Y respalda todo lo que puedas.

No olvides, lo más importante: disfruta. Una de las razones por las que elegiste este camino profesional (casi puedo apostártelo) fue para vivir nuevas experiencias. Ahí están y te están pagando por vivirlas (bueno, en realidad te pagan por el texto...).

Tengo un fin de semana para considerar todos estos puntos. Próxima parada: Las Vegas.

martes, agosto 13, 2013

Fiebre amarilla: Yellowcard México

Sobre el lanzamiento de Ocean Avenue Acoustic, la noche del 23 de marzo y Yellowcard México.

Hoy es 13 de agosto, lanzamiento a la venta del nuevo álbum de Yellowcard: una versión acústica de Ocean Avenue, el disco que hace diez años elevó a esta banda de Florida al estrellato. Sin escalas. En sí, el aniversario del disco fue el 22 de julio, una década desde que las notas de un álbum en apariencia simple salieran de miles de bocinas y audífonos alrededor del mundo. Yo conocí Ocean Avenue en el año en que salió. Uno de mis primos lo traía consigo en unas vacaciones y me quemó una copia. A la fecha es el único disco de Yellowcard que no tengo original, conservo ese CD quemado.

Hoy, 13 de agosto, celebramos diez años del álbum que sacó a esa banda de la fama local y la hizo recorrer el planeta –era su cuarta grabación de estudio, pero saben a qué me refiero. La fiesta empezará escuchando las versiones acústicas, más íntimas, de canciones que nos hicieron vibrar, llorar y levantarnos cada vez que algo en nuestra adolescencia salió peor de lo que esperábamos.

Celebro con una playera de Yellowcard y con el tatuaje en mi brazo derecho, un verso de "Believe", onceava canción del disco y una de las grabaciones que se convirtieron en mi mantra y en uno de mis mandamientos. También celebro recordando una de las noches más felices de mi vida, cuando Yellowcard se presentó por segunda vez en México y nos regaló a los fans uno de los gestos más hermosos que cualquier artista puede tramar:

El video oficial del primer sencillo de Ocean Avenue Acoustic, "Ocean Avenue", fue parcialmente grabado en la explanada frente a El Plaza Condesa, la tarde del 23 de marzo del 2013, con la participación de unos 150 seguidores de la banda, organizados y liderados por las administradoras del Street Team Yellowcard México (las chicas que sostenemos la manta con el nombre del Team, a unos pasos de la banda, y tenemos una expresión de orgullo y fascinación en la cara).

La historia sobre el anuncio del concierto y nuestra emoción desmedida pueden leerla aquí. Años como fan from hell de un montón de cosas me han desarrollado una experiencia invaluable para organizar eventos como éste. Desde ayudar al Magical World of Harry Potter Fan Club México en las ventas de medianoche con el lanzamiento de los libros de esa saga, hasta las listening parties con LP Soldiers México y el MCRmy, todo fue ir tanteando terreno para el 23 de marzo.

Estaba empeñada en entrevistar a la banda. Una de las razones por las que estudié periodismo fue la muy egoísta "quiero tener la oportunidad de hablar con la gente a la que admiro y decirle al mundo con sus propias palabras lo geniales que son". Le escribí a los Zepeda, promotores del concierto, y nada. Semanas de correos y nada, hasta que una semana antes del show me enviaron un escueto "La banda no dará entrevistas". No me rendí. Consulté a la #YCFamily en línea y una chica me proporcionó el correo del manager de giras de Yellowcard. Le escribí explicando que quería entrevistarlos para una revista en línea y que en el Street Team teníamos la duda de si podríamos, a través de mí misma, entregar a la banda unos regalos que hicimos especialmente para ellos. Subí a comer. Cuando volví tenía un correo de la manager de la banda con copia para el manager de giras. "¿Qué necesitas para la entrevista? ¿Cuántas personas entrarían al meet and greet? Pónganse de acuerdo y hagamos que suceda." Miré a mi alrededor y no sabía cómo comunicarle a mis compañeros de oficina que estaba a punto de desmayarme. Salí a llamar a las otras dos administradoras del Team. Les dije la parte de la entrevista, me ahorré el "Conoceremos a la banda" hasta que tuviera suficiente confirmación (maña de periodista, primero verificar al 100% las fuentes). "No hay problema, nos vemos a las 7PM afuera del foro. Entras a entrevistar a Ryan y Sean, quince minutos. Al terminar, tus amigas y tú pasan a conocer a la banda completa y entregan sus regalos. ¿Te parece bien?". Llamé a Sandra y a Dyrce... lloramos juntas al teléfono.

Triangulando desde Cancún organizamos al equipo: mandamos a hacer playeras con el logo del Team, gafetes, un scrapbook para los chicos, reuniones para preparar la estrategia... Llegó la noche del 22 de marzo y, mientras Dyrce, Marco, Sandra y Pau esperaban a Yellowcard en el aeropuerto de la Ciudad de México, yo me enteraba de la separación de mi otra banda favorita. No pude llorar, sólo seguí adelante y a la mañana siguiente me encaminé hacia El Plaza, vestida con mi playera del concierto anterior y con la nueva en la mochila. Pasé a comprar botanas para la comunidad, mis amigos llevaban formados desde las 8 de la mañana y yo iba algo tarde, porque las circunstancias y la vida.

Mientras caminaba, con mis bolsas de víveres en las manos, hacia el grupillo de gente en la entrada del Plaza, le grité a Dyrce "¡Dyr! ¡Traigo papas!". Esperaba un "Hola", no esa mirada de susto y la palidez en el rostro de mi hermana amarilla. Dyrce señaló a su lado y yo, como en película, giré despacio. Longineu Parsons III, baterista de Yellowcard, caminaba hacia la entrada del foro, acompañado por su respectiva custodia de la empresa promotora. Oh, por todos los dioses del rock. Nada te prepara para ese momento. De alguna forma conseguimos mantener la calma –a esa hora éramos quizá unos 20-25 fans en la fila– y saludar a LP con una sonrisa nerviosa. Él devolvió el saludo y, cuando vio la manta, nos preguntó si podía tomarse una foto con nosotros. La chica que lo cuidaba no se mostró muy feliz, apresuró las fotos y lo llevó rápidamente al interior del Plaza. Olvidamos pedirle que firmara la manta.

El shock nos duró lo que LP tardó en volver a salir a la calle –unos 15 minutos–, esta vez solo. Cargaba una bolsa del súper y por un momento creímos que o había salido a tirar la basura o a darnos de comer. Se paró a mi lado y dijo "Would you guys like some free CDs?", me quedé con la boca abierta. "I mean... ¿discos gratis?". ¿Qué le respondes al baterista de tu banda favorita cuando te ofrece discos gratis? es decir, qué le respondes después de recuperar el habla. LP se plantó en el centro del grupo y repartió discos de su proyecto solista. Y luego alguien produjo de la nada un plumón negro y procedió a firmar cada disco que había repartido. Y luego se tomó fotos con cada uno de nosotros. Estuvo alrededor de 20 minutos conviviendo, platicando, agradeciendo nuestra presencia, sorprendido de que lleváramos horas formados ahí afuera. Sorprendentemente, los ya alrededor de 35 presentes mantuvimos la calma. Ni un grito, ni un chillido, ni una fangirl lanzándose al cuello del músico. Así como vino, regresó sonriente a las profundidades del Plaza. Volvimos a olvidar pedirle que firmara la manta.

Se acercaba la hora y la fila crecía. Mis nervios estaban que me mataban cada vez que miraba el reloj. Dos horas para la entrevista. Las únicas que sabíamos la verdad éramos Sandra, Dyrce y yo. Éramos las primeras en línea, aún sabiendo que por ir al meet and greet perderíamos los lugares y entraríamos después que todos al concierto. Todo estaba listo. Empecé a rayar en la neurosis y las chicas me tranquilizaban "Todo estará bien". A eso de las 6PM se asomaron un par de hombres con aspecto estadounidense a mirar la fila. Ya éramos alrededor de 150 personas sobre la banqueta, todos numerados gracias a las grandes ideas del Team y a un plumón que alguna de nosotras traía en la mochila.

Me acerqué a uno de los individuos conspicuos y le dije "Excuse me, are you Daryl?" y respondió "Oh, you're Marcela, aren't you?". Conversé un poco con él acerca de la entrevista, me informó que sólo podría entrevistar a Ryan, que si eso estaba bien –¡claro que lo estaba!– y que cómo la estábamos pasando. "We're gonna need your help in a bit, though. I'll come back out soon". Misterios y misterios. Se resguardó en El Plaza y apenas pude regresar con mis amigas cuando unos diez compañeros fans me rodearon para preguntar qué había sido ese intercambio. Les expliqué lo de la entrevista. Estaban fascinados. Aprobaron mis preguntas y sugirieron algunas. Cuando por fin me dejaron pasar, sonrientes y satisfechos, vi la cara de terror de Marco. "Marce... la banda va a salir. El otro dude nos pidió que los ayudemos a organizar a la gente... la banda va a salir a tocar una canción". Nah, eso no pasa. Esas cosas pasan en las películas, en los videos musicales, en otras partes del mundo. Aquí no. No en este concierto.

"Por favor chicas, no celulares ni cámaras o la banda se regresa al Plaza," uno de los chicos del staff mexicano nos explicó vagamente que Yellowcard quería salir a tocar una canción acústica, que por favor los ayudásemos a controlar la situación, que por favor nadie tuiteara ni subiera nada a Facebook hasta después del suceso. Por favor, encarecidamente. Dudamos un poco, pero al final confiamos en la base de fans. Ellos son como nosotros. Ellos entienden. Nadie haría algo mal sabiendo que la banda nos pedía ese favor. Lo único que hice fuera de línea fue mensajear a uno de mis mejores amigos que ya venía en camino "Apúrate, urge que llegues, sorpresa grande con la banda".

Las chicas y Marco (fan del año para el Team) recorrimos la fila con la misma letanía. Al inicio no nos creyeron, pero poco a poco todo empezó a cobrar sentido (ayudó que el staff saliera a colocar los papelitos de "Si usted está parado aquí, está aceptando ser filmado"). Acomodamos a 150 personas frente a las escaleras del Plaza y los convencimos de permanecer tranquilos. "You girls in the front, holding your banner, please," Daryl había vuelto al exterior y convencía a los Lobos de Ocesa de que no era necesario construir un muro entre los fans y los músicos "You don't understand... these kids would never hurt the band. I trust them". Los quince Lobos que nos separaban del metafórico escenario se replegaron a los lados del contingente.

El silencio, la tensión, las ganas de vomitar. Sandra, Dyrce y yo sosteníamos media manta y nos mirábamos con cara de "Esto no es real". Entonces, la banda salió en fila india. Estábamos tan asustados que no recuerdo si gritamos o no. Sean Mackin (violinista) caminó hasta nosotras y nos hizo high-five. Nos abrazó. LP venía al final, grabando con su celular. Encontraron sus posiciones y empezaron... "Ocean Avenue" acústica [Es importante mencionar que en ese entonces no sabíamos que el "proyecto ultra secreto por el aniversario de OA" era un disco acústico... pero teníamos nuestras sospechas]. Lloramos, gritamos, cantamos. Nadie sacó celulares ni cámaras. Todos estábamos demasiado concentrados en esta banda maravillosa que nos estaba regalando uno de los momentos que recordaremos dentro de 40 años como parte de lo mejor de nuestras vidas.

Terminó muy rápido, aunque hayamos sentido que duró una eternidad. Sandra, Dyrce y yo nos abrazamos muy fuerte y decidimos que todavía no podíamos llorar. Nos faltaba conocer a la banda. Preparamos todo: los regalos, la manta y nuestras cosas en paquetes perfectos. Marco y Pau (mágicos y maravillosos) quedaron a cargo de la fila. Las tres chicas nos dirigimos al punto de encuentro. Alguien del equipo de Yellowcard salió por mí "You ready?", "I've been ready for the past ten years". Entré al backstage y conocí a Ryan Key, la persona que escribe las canciones con las que he crecido estos últimos diez años. Era real: ahí estaba el cabello rubio, los tatuajes de Star Wars, el ligero titubeo, la mirada tímida. Nos sentamos en un sillón y puse la cámara en el peor lugar que se me ocurrió: el video es una desgracia, pero sale el 80% de Ryan... y la entrevista era escrita, así que tampoco fue tan grave. Pregunté y pregunté y pregunté. La transcripción estará en línea pronto, pero la entrevista publicada pueden leerla aquí.

–Ryan, ¿lo que acaban de grabar con nosotros tiene alguna relación con el proyecto ultra secreto por el décimo aniversario de Ocean Avenue?
– [risas nerviosas] Eres muy inteligente al unir esos puntos... ¡pero no te diré más! Es sorpresa.

Al terminar la entrevista, le dije a Ryan que estaba muy agradecida por la música y las canciones. Gracias, básicamente, por estar ahí para mí todos estos años. "Gracias a ti por seguir a nuestro lado".

Me aguanté las lágrimas y salí al pasillo a esperar que entrasen mis amigas. Había más personas en el meet and greet, algunas por la buena onda del staff y otros porque se ganaron el pase en algún lado (nunca quedó claro, nunca nos enteramos y corrían rumores desagradables sobre las circunstancias de dicho "concurso"). Daryl nos separó del otro grupo "These girls manage your Mexican Street Team, they brought something for you guys". LP se acercó y nos dijo "Yo las vi hace rato allá afuera, tenían una manta genial". Los demás (Sean, Ryan, Mendez y Josh) llegaron con nosotras y recibieron sus paquetes con mucha alegría: playeras y gafetes del Team para ellos y sus señoras esposas/prometidas. Les entregamos el scrapbook con cartas, recortes y dibujos de miembros de la #YCFamily en México y otras partes del mundo. Les entregamos una bandera de México con el logo de Yellowcard y firmada por todos las fans que estuvieron formados antes de que salieran a tocar el acústico.

Hay bandas agradecidas y ésta. Los chicos no dejaban de abrazarnos, de disculparse por tardar en volver a México, de tomarse fotos con todos los fans que encontraron en esa habitación. Al final no había mucho tiempo y enfoqué mi atención en a) decirle a Mendez que a veces respondía mis tuits (dijo: "¡Claro que sí! Yo sé quién eres en Twitter, ethne"); b) dar a Portman la bienvenida oficial a la #YCFamily; c) volver a agradecerle a Ryan y d) *redoble de tambores* mostrarle a Sean Mackin mi tatuaje de "Believe", *su* canción, *la* canción... le encantó. Mi tatuaje fue oficialmente aprobado por la banda que lo generó. Algunas fotos grupales con todos los fans y Daryl dijo "Ok girls, now just you, the guys, and the banner". Ojos muy abiertos, ¿en serio? Fotos de nosotras con Yellowcard y la manta. Nos despedimos con millones de agradecimientos, nuestro corazón en sus manos, etcétera. Regresamos corriendo al frente del Plaza y entramos al foro. Olvidamos pedirles que firmaran la manta.
El concierto fue increíble. Todo lo que esperábamos y mucho más. Todas las canciones. Nuestros compañeros fans apoyándose entre sí. Gritamos, cantamos, lloramos. Llegamos tan al frente como pudimos y la banda nos reconoció. Nos saludaron desde el escenario. Al terminar de tocar, Sean le entregó a Dyrce su setlist y una plumilla de Ryan. Ryan le entregó su setlist a Sandra. Se despidieron con todo el amor de México sobre ellos, con todo nuestro agradecimiento. Cuando empezó a vaciarse la sala abracé muy fuerte a Hernán, uno de mis hermanos de toda la vida, todavía muy impresionada por todo. Luego encontré a mis hermanas amarillas y, por fin, pasado el estrés del día, pasado todo lo mejor, por fin, abrazadas en el centro de la pista, nos pusimos a llorar.
Pasaron algunos meses con pequeñas emociones como descubrir tuits y vines de Yellowcard y sus señoras usando las playeras que les regalamos. Vivimos con ellos el dolor por el accidente de Alyona y los apoyamos en todo lo que pudimos. Llegó el 23 de julio (diez años y un día después de la salida de Ocean Avenue) y con esa fecha el estreno de su nuevo sencillo, con video y todo. "Ocean Avenue" en versión acústica. Yo estaba fuera de la ciudad, cubriendo el Festival Internacional de Cine de Guanajuato. Redactaba unas notas en mi habitación, con mi roommie, cuando vi un tuit en mi teléfono y la miniatura de un video en el que de inmediato reconocí la cara de Marco. Tiene que ser una broma. La conexión en el hotel no era la óptima y pude ver el video gracias a la BAM de Nancy. Gracias Nancy.

Me contuve, pero igual lloré un poco. Estábamos ahí, en pantalla, acompañados por los 150 fans afuera del Plaza, con la manta y con nuestros puños en alto, cantando con Ryan, Sean, Ryan, Josh y LP. Estábamos ahí, intercalados con fans filipinos en su propio concierto. Ahí, en pantalla, en YouTube, en un momento histórico para cada uno de nosotros. Nunca sabré bien por qué eligieron México. Es un honor. Sospecho sus razones y hasta podemos intuir algunas gracias a los tuits con que Ryan defendió el video de los quejosos. "Tendrían que haber estado ahí para entender la energía en México y Filipinas, lo que se siente tocar ahí". Estamos en el video oficial del primer sencillo del disco con el que Yellowcard celebra diez años del álbum que lo cambió todo, para ellos y para nosotros. Y ese disco sale a la venta hoy, 13 de agosto.

Disfrútenlo.

miércoles, julio 31, 2013

GIFF parte II: la estrategia y el after

A continuación, una serie de consejos para la estrategia de cobertura de un festival de cine* (de acuerdo con mi experiencia personal). Y cómo sobrevivir al cierre**.

Cuando vas a un festival de cine, no siempre puedes dedicarte a ver películas. No cuando vas a cubrir. En el mejor de los casos verás tres películas al día y estarán aderezadas por la charla con el director o actor designado, la conferencia de prensa, la alfombra roja (si te toca estar al pendiente), etcétera. En estos festivales siempre está sucediendo algo, así que debes estar preparado.

  • Un equipo. Si te enviaron con acompañante (reportero/fotógrafo/editor), ya tienes medio camino andado. En caso de que vayas solo (como suele ser mi caso), necesitas un grupo. Algunos reporteros trabajamos mejor en manada y con gente a la que ya conocemos. Yo tuve la suerte de encontrarme este año con una amiga a quien quiero mucho y que me presentó a sus amigos, a quienes ahora les he agarrado afecto. Se armó una bandita fabulosa y nos adaptamos unos a otros. Entre varios es más fácil ubicar eventos, cubrir terreno, prestarse cargadores, estructurar la orden del día, aconsejarse en cuestiones de redacción y hasta que te tomen una foto entrevistando al señor director galardonado en Cannes, "para el recuerdo".
  • El programa y el mapa. Básicos. ¿Cómo vas a saber a dónde ir y a qué hora si no tienes el programa del evento? No confíes en Google Maps o Navigation, con la red de tu compañía telefónica todo puede suceder. No salgas de tu habitación sin haber marcado (y estudiado) tus opciones del día: plan A, plan B y hasta plan C.
  • Libreta y pluma. Porque las grabadoras no siempre tienen la mejor calidad y a veces es imposible encontrar una buena fuente de audio. Y yo que grabo con el celular prefiero no dejarlo lejos de mí durante la conferencia, no se me vaya a olvidar.
  • Mochila resistente. Terminarás cargando tus cosas y las de alguien más (una cámara, una bolsa con ropa, unos zapatos ajenos), de modo que necesitas una mochila o bolsa espaciosa.
  • Conoce la sede. Date tiempo para respirar y siempre que puedas come en un lugar diferente (pero que tenga notas de consumo o facturas). Eso ayuda si tienes que escribir una nota de color y, bueno, alejarte tantito del ambiente de trabajo también se agradece. Importante: nada de cerveza en horas laborales, te alenta y para eso está la noche.
  • Aprovecha el hospitality. Está ahí por una razón. Tiene comida y bebida gratis (suficiente para que aguantes el día, pero si quieres comer-comer revisa el punto anterior), enchufes suficientes (o gerentes de restaurante buena onda que dejan que tus amigos y tú roten el mismo cargador detrás de la barra durante horas) y algo muy importante: sillas frente a superficies para redactar.
  • Ubica los baños, claves de red y enchufes. Cuando llegues a la sede, auditorio, hotel, restaurante, etcétera, localiza esos tres importantes artículos de emergencia. Son fundamentales para tu supervivencia.
  • Ubica los OXXO y demás tiendas de conveniencia. Ya sea que tus amigos necesiten un cigarro o una botella de agua (las prioridades del periodista se ponen a prueba en una cobertura), saber dónde están y a qué hora cierran estas tiendas es información valiosa.
  • Radiotaxi. Todos los hoteles tienen en recepción al menos un número telefónico para solicitar servicio de taxi en la ciudad o pueblo donde suceda la magia. Además, estos servicios generalmente ofrecen comprobante, a diferencia de los taxis callejeros. 
  • Factura todo lo que puedas. Si, en el mejor de los casos, te dieron viáticos en la oficina, necesitarás comprobarlos. Factura todo lo que puedas o al menos consigue comprobantes de consumo en los sitios a los que vayas. Si compraste comida en el súper porque el hospedaje no incluye comidas, factura esos tickets.
  • Ejercítate. Si pasaste mucho tiempo sentado durante el día de cobertura, intenta caminar al menos un tramo del camino de regreso. O sal a bailar. Mantente saludable. Tu cuerpo lo agradecerá al final de la semana.
  • Discrimina contenido. No todo sirve para el medio en el que trabajas ni para todas las plataformas del mismo, pero algunas cosas pueden servir para tu blog personal o para otro tipo de lectores. Todo es información, aprovecha que tienes ese acceso directo.
  • Las fiestas. No sirve de nada negarlo, las fiestas son fundamentales para hacer contactos y quizá sacar ese dato que va a servirte después para... lo que sea. Búscalas. Busca los afters. Y si no consigues pulsera, siempre puedes conseguirte un plan B (personalmente, recomiendo los karaokes).


El after
La meta no es cumplir con tus responsabilidades periodísticas –eso el trabajo, la misión general. Tu meta debe ser sobrevivir al festival. No podrás evitar el alcohol ni las desveladas, pero sí puedes prepararte para ello (pero eso será otro post, otro día). Consejos básicos:
  • Sé una persona organizada. Desarrolla una rutina, deja tus cosas siempre en el mismo lugar, para no perderlas y para notar de inmediato si te falta algo.
  • Los teléfonos de todos con su número de habitación. Por si alguien se queda dormido, puedes evitarle la pena de perder el autobús.
  • Mucha agua y comida saludable. La alimentación es impredecible durante el festival. A veces sustituyes la cena por cerveza, otras sólo consigues hamburguesas, otro día tal vez sólo encontraste ensaladas. Tu cuerpo necesita regresar a su rutina. Cuando estés de vuelta en casa bebe mucha agua y come lo más sano que puedas.
  • Ejercicio. Lo mismo. Necesitas recuperar la figura.
  • Duerme. Descansa mucho. Aunque no quieras, tu cuerpo empezará a apagarse desde que te subas al autobús de regreso. Ojalá puedas trabajar desde casa al día siguiente.

Por ahora, creo que es todo. No cumplí mi meta de escribir sobre la experiencia general del festival en este espacio, pero creo que dos escritos para un sólo evento es romper una marca personal.
Espero los hayan disfrutado y les sean útiles en la vida.

¿Ustedes tienen alguna estrategia personal que gusten compartir?

*Gracias a las aportaciones de Karina Cabrera en este tema.
**Gracias al Matriarcado, sin quienes nunca hubiera sobrevivido al GIFF. ¡Los extraño!

miércoles, julio 17, 2013

GIFF parte I: El pre.

Siempre intento bloguear sobre los festivales a los que voy en este espacio personal... y rara vez consigo postear más de un texto. Esta vez lo intentaré de nuevo... camino al Guanajuato International Film Festival.


En esta primera parte abordaré los preparativos. ¿Qué lleva una reportera a un festival de cine? Años de experiencia (bueno... dos años... más la experiencia combinada de convenciones diversas) me han llevado a desarrollar algunas estrategias para ir lo mejor preparada posible.

Cobertura:
Vas a trabajar, así que necesitas tus básicos para cubrir el festival.

  • Computadora. Generalmente la sala de prensa ofrece computadoras de acceso gratuito para que escribas tus notas entre conferencias o funciones, pero si lo tuyo es más del tipo cobertura pesada y llegas en la noche a transcribir, redactar y enviar, te es muy necesaria una laptop. 
  • Celular con plan de datos. No confíes en que las sedes y el hotel tendrán internet inalámbrico, es mejor pagar un extra en tu plan que quedarte en el pánico de "no pude enviar algo a tiempo porque no pude conectarme a la red".
  • Internet en el hotel. Hablando de pagar extra... no siempre es gratuito el acceso a Internet en el hotel, así que asegúrate de que tienes posibilidad de red y si tienes que pagar por ella, recuerda que tienes el RFC de tu medio o inclúyelo en tus viáticos.
  • Cámara de video y fotográfica tan portátil como se pueda. Si tu celular tiene una buena cámara, es suficiente. El punto es que no pierdas material porque tu cámara está fallando o porque no te mandaron fotógrafo (eso pasa, mucho).
  • Suficiente memoria en todos tus artilugios tecnológicos. Se explica solo.
  • Libreta y pluma. Son más confiables que la batería de tu iPod, aunque no necesariamente tan portátiles. Lleva los propios, aunque seguramente en el kit de prensa te proporcionen ambas cosas en medidas estándar.
  • Mochila. O una bolsa grande. Es muy probable que te den una con el material de prensa, pero no sabes de qué tamaño será, qué tan cómoda, si cabe tu equipo, qué tan protegidos van tus gadgets... mejor lleva una a la que estés acostumbrada, donde además de tu equipo quepan todas las cosas que cargamos en las bolsas generalmente. 
  • Cables. Todo necesita batería y todo necesita cables. Asegúrate de llevar los cargadores correctos para celular, cámara, tablet, iPod y laptop. Si puedes llevar dobles, mejor. Tip: no dobles los cables, se lastiman, mejor enróllalos sin apretarlos demasiado y átalos con un listón o cuerda suave.

Ropa:
Funciones de gala, fiestas y funciones normales. El mundo no se acaba si vas a la función inaugural en la misma ropa con la que pasaste 6 horas en el autobús que te llevó al Festival (en serio, eso nos pasó hace un año) y de ahí llegas en las mismas fachas a la fiesta subsecuente, pero por si acaso, prepárate. Otra nota importante aquí es que está padre mejorar la imagen de la prensa. No siempre se nos ve con buenos ojos porque no siempre tenemos la decencia de llegar a un evento vestidos ni remotamente cercanos al dress code. Esto se entiende cuando cubres varias conferencias y asuntos en el mismo día, ni modo que a todo vayas de traje / vestido... pero acá te están dando la pista. Aprovéchala y empaca:

  • Vestido de coctel / traje sastre. Suficientemente cómodo y formal, para funciones de gala y algún otro evento 'elegante'. Combina blusas, sacos, chales y accesorios (yo, dando consejos de ropa, ternura) por si no llevas un outfit para cada cosa (lo cual sería imposible a menos que seas un as de la moda).
  • Zapatos versátiles y cómodos. Para esos trajes recién mencionados.
  • Tenis o botas. Para las fabulosas y empedradas calles de la ciudad en cuestión. El tiempo que pases caminando o sentada tendrá consecuencias en tus pies, lleva zapatos que sirvan para ambas cosas y considera la posibilidad de no volver a tu hotel para cambiarte.
  • Ropa cómoda... que no sean pants y pijama. Yo soy la primera en ponerse playeras de bandas y mezclillas cómodos para ir a una convención, pero al final del día es trabajo. Si vas a ponerte mezclillas, que estén limpios (o sean de color oscuro y no necesites lavarlos más de una vez cada 5 puestas). Si vas a ponerte playeras, que sean de tu talla y que sean cómodas. No olvides al menos un par de blusas intermedias por si acaso.
  • Pijama. Averigua el clima de la región. No quieres enfermarte a medio festival porque hace mucho frío y te llevaste un camisón ligero (o porque hace demasiado calor y llevaste pijama de lana). Y pantuflas, porque no quieres pisar el piso del hotel, nunca.
  • Chanclas para el baño. Te estás haciendo un favor, en serio.

Higiene:
Algunos tips que nunca están de más.

  • Lo de las chanclas es real. Cuida tus pies.
  • Lleva lo básico de tus implementos para el cabello, porque no quieres arriesgarte a que el cabello rizado te traicione: mousse, ligas, pasadores, diademas, etcétera.
  • Hay toallas en el baño y seguramente no tienes mucho espacio en la maleta. No lo desperdicies en tal paranoia, los bichos tampoco están para tanto.
  • Desodorante. Recuerda que no sabes si podrás volver a tu hotel en todo el día. TODO. EL. DÍA.
  • Perfume. La misma idea. LA. MISMA. IDEA.
  • Maquillaje. Keep it simple para poder elevarlo si es necesario pero que si la película te hace llorar no te irrites los ojos con el rímel corrido.

Y muy importante.
Dormirás en un hotel y probablemente compartirás habitación con algún colega. Si se conocen y se llevan bien, genial (yo tendré esa suerte durante al menos la primera mitad del festival). Si no se conocen: ¡yei! oportunidad para ejercitar tus habilidades sociales. Si se conocen y no se llevan bien: deal with it y no provoques, pero tampoco te tragues todo lo que te avienten.

Por ahora, eso es todo. Si se les ocurren más tips, siéntanse libres de agregarlos... ahora me voy a empacar. Con una lista donde marcaré lo que me llevo y utilizaré para registrar mis pertenencias cuando venga de regreso. Y así corro menor riesgo de perder algo.

jueves, julio 04, 2013

Música naïve

De listas de reproducción que nos llevan de regreso a los ingenuos años de la secundaria...

Esta semana, Regina y yo hemos atravesado una especie de regresión a la adolescencia, con playlists que incluyen a Hilary Duff, Avril Lavigne, Simple Plan, Blink 182 y Good Charlotte. No nos pregunten por qué pues no tenemos idea... pero qué música tan divertida solíamos escuchar en esas épocas de "todavía uso uniforme en la escuela y muero por entrar a la prepa para vestir ropa de calle".

Les dejo dos de esas listas de reproducción, porque pues es divertido y a uno le traen muy buenos recuerdos. Otros no tanto... pero buenos en su mayoría.

Hilary Duff 
Para ir a la playlist da clic aquí.

Desde Lizzie McGuire hasta Cinderella Story, Hilary tuvo grandes momentos de motivación para las adolescentes que no teníamos idea de qué nos esperaba en el mundo real.

Destacadas:
  • "This is what dreams are made of" es una gran canción pop dentro de su nicho (Disney) y tiene más corazón que el 90% de la música creada por y para niños Disney. 
  • "So Yesterday" fue EL himno para los corazones rotos de las chicas de secundaria e inicios de la prepa... porque come on, girl power at its best (si tienes 14 años y eres una chica de clase media, esto es tu "I Will Survive").


Avril Lavigne

Su primer disco, Let Go, fue lo más cercano que tuvo mi generación a unas Runaways. Era una chica de 17 años (¡apenas 4 años mayor que yo!), que patinaba, se vestía muy cool, tenía un contrato discográfico y además se daba el lujo de guiñarle un ojo al punk. Y era canadiense. Y componía sus propias canciones. How awesome can you get for a teenager? Si Cherri Bomb hubiera existido en ese entonces, otra cosa sería... pero si me vieron a los 13-14 años andar por la vida con una corbata encima de la blusa... bueno, ya saben a quién culpar. (Si me vieron con corbatas entre los 16-18, es culpa de My Chem).

Destacadas:
  • "Sk8er Boy" – me salto la obvia "Complicated" – esta rola es un "in your face, bitch!". Y habla de este romance divertido en el que ella fue la princesa que rescató al chico alternativo al que la fresa tarada despreció por "ser diferente". Es una canción muy divertida, incluso diez años después.
  • "Anything but Ordinary" era una oda a la chica rara que no va a conformarse con la sociedad. Que prefiere ser lo que sea menos ordinaria, porque simplemente no le va. Si algún día tengo hijas, esto va en su música, en lugar de, digamos Carly Rae Jepsen.


Punk feliz
Para ir a la playlist da clic aquí.

Ay, el dulce recuerdo de ese primer concierto de Simple Plan... al que no fui. Traumas, traumas everywhere. Pero ningún trauma como los daddy issues de Good Charlotte; esos tipos neta la sufrieron y lo reflejaron en *cada* canción de sus primeros dos discos. Y ¿cómo olvidarnos de Blink 182? Tan 90s y al mismo tiempo tan de mi adolescencia...

Destacadas:
  • "Promise" - Simple Plan. Esta canción significaba mucho para un amigo y para mí en la segunda mitad de la prepa. La cantábamos juntos cada vez que todo parecía irse al demonio y nos prometíamos mutuamente que todo estaría bien, siempre que nos tuviéramos uno al otro. Hace años que no la escuchaba y wow... ya no me recuerda lo malo, solamente lo bueno.
  • "Hold On" - Good Charlotte. Una de mis amigas más antiguas (básicamente la conocí en el kinder y luego entramos juntas a la prepa) era muy fan de Good Charlotte. Y esta canción por muchos momentos fue uno de esos himnos de salvación que las bandas le cantaban a sus fans, porque cuando eres adolescente, muchas cosas normales parecen ser el fin del mundo. En retrospectiva, todo cambia. Pero entonces... lo único que quedaba era sostenerse de algo.
  • "The Rock Show" - Blink 182. Siempre he querido enamorarme en un concierto. No es culpa de Blink, pero contribuyen a esa fantasía juvenil. Quiero conocer a alguien en un concierto y quiero ese momento mágico cuando descubres a ese otro gritando las mismas palabras que tú... :)


En fin, ojalá disfruten un poco de este blast from the past. Yo ciertamente me he divertido mucho escuchando, seleccionando y escribiendo.